Robi un robot para la interacción social con niños con autismo - 2da Edición - (2021)

Abstract

Por tercer año consecutivo se continuó con la investigación titulada Robi un Robot para la Interacción Social con Niños con Autismo, en el cual se plasma la importancia de las terapias en la niñez desde temprana edad y los diferentes tipos de tratamientos que existen a su vez las nuevas herramientas de apoyo para los terapistas como la robótica social o inclusiva.

Los niños con Autismo o conocidos como Trastornos del Espectro Autista (TEA), se caracterizan por cambios en la comunicación social y patrones repetitivos de comportamientos, todo esto se refleja por las dificultades para responder a los estímulos sociales, imitar comportamientos, reconocer y entender los estados mentales en sí mismos y en los demás (Zwaigenbaum L., 2005).

Estos cambios influyen claramente en la adaptación del niño con TEA a sus contextos naturales con implicaciones para su desarrollo cognitivo, lingüístico y emocional (Costa S., 2014). Y generalmente, los distintos tipos de tratamiento pueden dividirse en las siguientes categorías: enfoques en torno al comportamiento y la comunicación, enfoques en torno a la alimentación, medicamentos y medicina complementaria y alternativa; muchas de estas terapias incluyen procesos repetitivos, monótonos, pero a su vez con una implementación de mucho cuidado para los niños según su grado de autismo.

De esta forma, la robótica social en su contexto general busca que los niños con autismo en términos generales, y en especial si se habla de aquellos con edades comprendidas entre los 5 y los 12 años, desarrollen habilidades que frecuentemente no se logran en corto o mediano plazo, tales como mostrar sentimientos, ser más empáticos y socializar; en relación con este último punto se verá cómo los lazos de comunicación y socialización, además de la amistad, se refuerzan (Innted, 2019). Con base en lo antes mencionado